lunes, 6 de mayo de 2013

¿Las cosas o la gente?

Me he preguntado muchas veces, ¿por qué somos pobres?

Bueno, voy a intentar contar una historia. Responda esta pregunta ¿qué haría usted lector?

Supongamos que usted ha trabajado duro toda la vida y llega a administrar un local en una empresa. En este local, usted dispone de cualquier libertad, siempre y cuando cumpla con ciertas metas por supuesto.  Entonces, usted sólo necesita pasarle un número fijo de ganancias a la empresa. Luego, puede hacer lo que se le ocurra con el resto del dinero. Por ende, puede usted contratar/despedir, mejorar, arreglar, limpiar, pintar, lo que quiera o imagine con el local.
¿A dónde voy con esto? Resulta que usted tiene a su cargo 5 trabajadores. Y las ganancias netas son por poner un ejemplo Q50,000.00 Y digamos que el salario mínimo es de Q3,000.00. Ahora voy a poner dos opciones.
Opción A: Pago Q3,000.00 a cada trabajador, y me quedo con Q35,000.00.
Opción B: Pago Q8,333.33 a cada trabajador, y me quedo con Q8,333.33.
Debe tomar en cuenta que el resto de trabajadores no viven en la ciudad y siempre toman un bus para llegar a trabajar, por lo que su educación es limitada (tuvieron que trabajar desde pequeños).
Usted sacó un título universitario y ha trabajado duro desde entonces.

La pregunta del millón es, ¿Qué opción tomaría usted? ¿A o B?
Estoy un 99.99% seguro que la mayoría responde: "Por supuesto, ¿cree usted acaso que yo soy tonto? Pues opción A. Al fin de al cabo ellos sólo necesitan el salario mínimo y yo tengo una familia que mantener también."

Y respondo con otra pregunta, ¿Qué nos importa más? ¿Las cosas o la gente? Estoy seguro que todos responden... Por supuesto la gente. Pero mi estimado lector si usted respondió la opción A, déjeme decirle que le importan más las cosas que la gente.

El ejemplo es ridículo y sé que no es para que suceda en la vida real. Pero lectores, si tan sólo pudieramos comprender que si compartimos nuestra riqueza con el resto, podríamos comenzar a trabajar como una unidad, una sociedad con propósito y no una sociedad de salvese quien pueda.

Eso es lo que nos falta para vencer nuestra mentalidad de pobreza. Trabajar juntos, no es la culpa de los políticos, no es la culpa de aquel o es que si el otro hiciera esto o el otro. Es nuestra culpa, son nuestros actos los que nos han separado los caminos y nos es imposible confiar en el otro y caminar juntos por una mejor sociedad.

Pero tal vez yo sólo estoy delirando con ideas. Por lo que me gustaría es que escriban lo que piensan sobre esto. Y si tienen tiempecito que miren este video: (Es muy largo yo sé pero si no basta con que puedan leer lo que puse y espero que al menos los haga considerar tomar la opción B si llegan a tener esta oportunidad).

http://www.youtube.com/watch?v=fnm956LkFV8&list=FLVIouEJWVkGZ4G5fDsrtazg&feature=mh_lolz

4 comentarios:

  1. Creo que hace falta el tomar riesgos pero comunidad o como conjunto. Eso ya lo ha hecho gente en el pasado y da resultados. Es necesario asumir riesgos donde se comparte tanto las ganancias como la posibilidad de riesgo.

    Si hay algo para lo que somos buenos es para trabajar no se porque tenemos que estar mal económicamente.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Muchas gracias por tu comentario. Supongo que siempre es difícil tomar un riesgo si no vemos un resultado seguro. Pero en definitiva falta alguien a quien podamos citar como ejemplo.

      Eliminar
  2. "... si tan solo pudiéramos comprender que si compartimos nuestra riqueza con el resto, podríamos comenzar a trabajar como una unidad..." Yo seleccionaría esta frase para resumir este escrito y me gustaría comentarte un poco al respecto. Creo que adicional a poder comprender es necesario querer comprender; después de querer el poder será mucho más sencillo.
    Como segundo punto pienso que no solamente es la riqueza material lo que deberíamos compartir (puede ser que lo haya comprendido así por el contexto del ejemplo). Existen otras "cosas" que, en mi opinión, ayudarían a fomentar la unidad antes que el dinero. La más importante sería para mí el deseo de superación personal, el deseo de querer ser mejores cada día por el simple hecho de querer serlo.
    Finalmente, creo que a todo esto hay que agregarle el rechazo al cambio que existe en muchos sectores de la sociedad. Desde que tengo memoria la opción A ha predominado prácticamente en todo y hoy sigue siendo igual. En general, el trabajador se ha "acomodado" a vivir con lo mínimo y le funciona. El empleador se ha "acomodado" a un nivel elevado de vida y le funciona. Si alguien quiere sobresalir o superarse, se le tacha de "subido o agrandado"; tal y como lo hacen los cangrejos en el bote (moraleja de una obra de teatro). Es necesaria la voluntad de querer salir de la zona cómoda y estar dispuestos a recibir las críticas, señalamientos, etc. Para poder alcanzar esa unidad que necesitamos.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Muchas gracias por tu opinión Marito. Y te doy toda la razón, no es sólo el dinero lo que se comparte, si no los problemas, el tiempo, las metas. Definitivamente la superación personal afecta mucho. Si no queremos hacer algo (alcanzar una meta), es imposible obligarnos.

      Como comentaba anteriormente, sería bueno sólo probar esta nueva mentalidad y ver cuales son los resultados. Pero en definitiva si empezamos ahorita, los resultados serán a largo plazo y no a corto. Sigo pensando que la misma calidad de educación para todos es siempre el primer paso.

      Eliminar